miércoles, 21 de diciembre de 2016

Alwadi.ira – Ecologistas en Acción denuncia un proceso irregular en la adecuación de la Autorización Ambiental Integrada concedida a Portland Valderrivas, S.A., en 2006, a la Directiva europea, de obligado cumplimiento, 2010/75/CE de emisiones industriales. ¿A qué juega la Junta de Andalucía? ¿se ha tratado de un Error? ¿es falta de competencia por parte de quien concede las Autorizaciones Ambientales? o ¿Están jugando una vez más con la salud de los ciudadanos?
– Dicha adecuación se publica en el BOJA del 13 de diciembre de 2016: La actualización de la AAI, para su adecuación a la Directiva de Emisiones Industriales, llega con casi tres años de retraso, pues se debería haber producido antes del 7 de enero de 2014.
– La actualización de la AAI es ostensiblemente favorable a los intereses de Cementos Portland Valderrivas, S.A., pues entre otros aspectos, permite que la cementera funcione emitiendo contaminantes por encima de los valores límite de emisión en periodos de hasta 24 horas.
– La actualización no es transparente, pues incluye determinaciones que no son de conocimiento público.
– La actualización no modifica los valores límite de emisión para adecuarlos a los de la Directiva de emisiones industriales en el caso de la incineración de residuos, permitiendo por ejemplo emisiones superiores a las establecidas en esa Directiva.
La Autorización Ambiental Integrada de Portland Valderrivas, S.A., es de 2006, en ella se establecen unos Valores Límites de Emisión de sustancias tóxicas a la atmósfera. La adecuación a la Directiva europea 2010/75/CE, que restringe muchas de esas emisiones, se inició el 23 de agosto de 2013 y acabó con la publicación en el Diario Oficial de la Junta de Andalucía del 13 de diciembre de 2016. El plazo límite que marca la Ley 16/2002 para esa actualización, en su Disposición Transitoria Primera, era el 7 de enero de 2014, por lo que se produce casi 3 años más tarde.
La actualización de la Autorización Ambiental Integrada es una obligación que dimana de la Directiva 2010/75/UE, llamada Directiva de Emisiones Industriales, para garantizar que todas la AAI se adecuan a las determinaciones de dicha Directiva en todo un conjunto de aspectos que la anterior Directiva sobre la Prevención y Control Integrado de la Contaminación (Directiva 96/61/CE) de 1996 no recogía. Esos aspectos, todos ellos muy importantes, son los relacionados con las actuaciones del promotor en caso de incidentes y accidentes en la instalación, el incumplimiento de las condiciones de las autorizaciones, la aplicación de la jerarquía de los residuos, el cierre o clausura de la instalación, las medidas a adoptar en los arranques y paradas, el control sobre el suelo y las aguas subterráneas, los residuos que incinere y los valores límite de emisión cuando se incineren residuos.
La actualización de la autorización a Cementos Portland Valderrivas, S.A., aprobada el 11 de noviembre de 2016 y publicada ahora, recoge la mayoría de estos aspectos, aunque no todos. Por ejemplo no incluye los valores límite de emisión que establece la Directiva 2010/75/UE cuando la instalación incinera residuos, que sí se recogieron en la modificación de la AAI de 16 de septiembre de 2014 que daba el visto bueno a la incineración de 292.000 toneladas de un amplio abanico de diferentes tipos de residuos (lodos de depuradora, neumáticos, plásticos, fracción de rechazo de residuos domésticos, residuos textiles, etc.) y que pretendía convertir la fábrica de cementos en una macroincineradora. Proyecto que se ha paralizado por la intensa oposición social y por las medidas adoptadas por el Ayuntamiento de Alcalá de Guadaíra.
En ocasiones esa actualización de la AAI no es nada transparente, pues se refiere a determinaciones recogidas en documentos que no son públicos, como correspondencia privada entre la Delegación Territorial de Medio Ambiente de Sevilla y Cementos Portland Valderrivas, S.A. En otros casos la actualización es tremendamente favorable a la empresa, cuando permite que la cementera funcione emitiendo contaminantes como el NO2 por encima de los valores límite de emisión en periodos de hasta 24 horas, cuando el máximo establecido en la modificación de 16 de septiembre de 2014 es de 4 horas.
Las instalaciones cuya AAI haya sido actualizada deben estar cubiertas por un plan de inspección. La fábrica de cemento de Cementos Portland Valderrivas en Alcalá de Guadaíra no está incluida en ningún Plan de Inspección Medioambiental para 2016.
Aunque Alwadi.ira – Ecologistas en Acción reitera su fundamentada oposición a la incineración de residuos en instalaciones cementeras, es inadmisible que la Administración renuncie a exigir al menos el cumplimiento de los valores límite legalmente establecidos en cuanto a sus emisiones contaminantes.
Hacemos un llamamiento a la Junta de Andalucía a actualizar las AAI de Portland Valderrivas, S.A., y adecuarla correctamente a las determinaciones de la Directiva 2010/75/UE.
 Alcalá de Guadaíra, 19 de diciembre de 2016

lunes, 19 de diciembre de 2016

Las migajas envenenadas que caen de la mesa de la cementera


Hace un par de días nos encontramos esta noticia en prensa: Portland Valderrivas acaba de entregar unos maravillosos regalos a dos niñas del Colegio Ángeles Martín Mateo, de la Barriada la Liebre.

Según el artículo, “El objetivo principal de esta iniciativa es seguir estrechando vínculos entre la fábrica y su entorno y poner de manifiesto que es posible una convivencia real y valiosa entre la industria alcalareña y sus vecinos”

Y para estrechar estos vínculos, en lugar de evitar que el Colegio Ángeles Martín Mateo se cubra de clinker tóxico de cemento y no hacer nada para evitarlo. En lugar de cumplir con la normativa de emisiones de la Unión Europea y durante casi 3 años emitir contaminantes por encima de los valores límite permitidos por dicha normativa y sin recibir ni siquiera una multa por ello, han decidido maquillar la realidad organizando un concurso de pintura entre los escolares de Alcalá, cuyo tema ha sido “la repercusión o impacto de la industria en la vida cotidiana de los escolares”

De los 9.000 alumnos de Alcalá, sólo han participado una veintena de niños. De estos veinte dibujos, por supuesto y como no podía ser de otra manera, las ganadoras pertenecen al colegio que sufre cada día más que nadie su falta de respeto por la vida cotidiana y la salud de dichos escolares y de la ciudadanía de toda la comarca.

En lugar de intentar comprar voluntades y tratar de lavar su conciencia con unas mochilas y unos libros, Portland Valderrivas debería molestarse en cumplir con las leyes y sobre todo preocuparse no sólo por sus beneficios, sino por la salud de los ciudadanos que viven en su entorno.


Lucía López, del CEIP Ángeles Martín Mateo, ganadora del "Concurso de Pintura Infantil para centros escolares"

jueves, 8 de diciembre de 2016

La Coordinadora Andaluza de Plataformas contra la Incineración en Cementeras exige a la Junta la realización de un Plan Andaluz de Prevención y Gestión de Residuos

Acuerda ampliar su lucha contra la incineración a Albox, Carboneras, Jerez y Málaga, pedir a la Junta la revisión de las autorizaciones para incinerar y que los Ayuntamientos no otorguen licencias para esta actividad.

Alcalá de Guadaíra acogió en el marco del VII Encuentro Estatal de Plataformas contra la incineración de residuos en cementeras, la reunión de la Coordinadora Andaluza de Plataformas contra la Incineración en Cementeras, en la que las organizaciones integrantes -Córdoba, Alcalá de Guadaíra y Niebla- acordaron, entre otras cuestiones, iniciar contactos para ampliar su labor a municipios andaluces en las que ya se lleva a cabo la incineración de residuos como Albox, Carboneras, Jerez de la Frontera o Málaga.



En el marco del encuentro estatal celebrado en Alcalá de Guadaíra, la Coordinadora Andaluza tuvo la oportunidad de conocer experiencias de otras coordinadoras territoriales a nivel estatal. También se aprobó hacer más visibles y transparentes los listados de elementos contaminantes, exigir estudios epidemiológicos en los municipios en los que existen cementeras incinerando, así como la aplicación de mejores técnicas disponibles en las distintas cementeras, sin pasar por la coincineración, así como la sustitución del coque por el gas natural en las distintas instalaciones cementeras.

Entre los puntos de acuerdo más destacados se decidió exigir a la Junta de Andalucía la realización del Plan Andaluz de Residuos, PARI, dado que el actual está obsoleto, dejando fuera del mismo la coincineración y a la incineración de residuos. Por último, se puso sobre la mesa la necesidad de analizar desde Andalucía la situación específica del territorio andaluz desde un punto de vista económico y social, que ayude a mejorar la información ciudadana sobre estas instalaciones contaminantes y por tanto, que mejore la lucha contra éstas.


Sobre la Coordinadora Andaluza

La Coordinadora Andaluza de Plataformas contra la Incineración en Cementeras se puso en marcha el pasado mes de junio en Córdoba y está compuesta en la actualidad por las plataformas de Córdoba, Alcalá de Guadaíra y Niebla.

Los objetivos de la Coordinadora son, principalmente, la petición a la Junta de revisiones de autorizaciones concedidas, acompañadas de un estudio epidemiológico, con la participación ciudadana. Asimismo la solicitud de un Plan de Prevención y Gestión de Residuos  (PARI) acorde con el Principio de Precaución y la jerarquía de tratamiento recogida en las Directivas Europeas y legislación estatal, con participación ciudadana y aprobación en el Parlamento Andaluz.

Igualmente la Coordinadora persigue que los Ayuntamientos andaluces extremen el celo en la protección de la ciudadanía absteniéndose de otorgar licencias para esta actividad, y por último el llamamiento a ciudadanos y colectivos andaluces afectados o amenazados por algún proyecto de incineración para que se sumen a la Coordinadora Andaluza.

Precisamente será en Niebla o su entorno en donde el próximo mes de marzo tendrá lugar el próximo encuentro de la Coordinadora Andaluza.




domingo, 4 de diciembre de 2016

Intervención Carmen Molina sobre la Estrategia andaluza de la Calidad del Aire

Carmen Molina, parlamentaria de Equo en el grupo de Podemos Andalucía, con la que nos entrevistamos hace unos meses, destaca los efectos de la incineración de residuos en cementeras en la calidad del aire que respiramos y, frente al chantaje de las empresas del sector en cuanto a creación de empleo, destaca el impacto socioeconómico negativo que genera esta actividad.

Carmen Molina ha insistido en la incompatibilidad entre la incineración de residuos por la que algunas empresas ubicadas en Andalucía quieren apostar, y una adecuada calidad del aire que respiramos. Así lo ha puesto de manifiesto en respuesta a la intervención del consejero de Medio Ambiente, José Fiscal, que ha comparecido para informar sobre la Estrategia Andaluza de Calidad Aire.
Una estrategia en la que, tal y como insiste Molina, no cabe la apuesta por la coincineración que pretenden llevar a cabo algunas empresas –caso de la cementera de Alcalá de Guadaíra, en Sevilla-, que apelan a los supuestos beneficios medioambientales de esta actividad, que realmente provoca una importante merma en la calidad del aire que respiramos debido a las emisiones, que vendrían a empeorar la concentración en la atmósfera de gases que son muy perjudiciales para la salud.
“Parece que hacerse cargo de la gestión de residuos es una actividad económica muy rentable, y además las cementeras autorizadas negocian con la venta de emisiones de CO2. Pero debe quedar claro que la incineración es una fuente de energía sucia e ineficiente, a pesar de que se quiere vender como energía limpia y parte de la transición energética. Sin embargo, tiene unos niveles de aprovechamiento energético muy pobres”, ha explicado la parlamentaria, que recuerda que dentro de la política comunitaria en materia de residuos, se establece que la jerarquía adecuada para la gestión es prevención, reducción, reciclaje, valorización material, y como última opción, la incineración o eliminación, “que tienen la misma consideración y deben ser siempre la última opción”.
Durante su intervención, Molina también se refirió al “chantaje” que suelen llevar a cabo las empresas con respecto a los puestos de trabajo, amenazando con despidos en el caso de no obtener las autorizaciones necesarias y apelando a la creación de empleo que supondría la puesta en marcha de esta actividad. Pero también este argumento queda desmontado con sólo tener en cuenta los “impactos socioeconómicos negativos” que genera una actividad con la que se empeora notablemente la calidad del aire.
Así, tanto el turismo como la actividad agroalimentaria son especialmente sensibles respecto a la contaminación atmosférica y una mala calidad del aire, que en turismo se traduce en una pérdida de atractivo cara al visitante, y en agricultura en una disminución del rendimiento y una mayor sensibilidad a plagas y enfermedades.
De este modo, la incineración destruye empleo en otros sectores, y emplea a menos personas, por ejemplo, que las plantas de reciclaje, que según la fundación Amigos de la Tierra “podría crear para el año 2020 hasta 750.000 nuevos puestos de trabajo en toda la Unión Europea”.
Por ello, Carmen Molina ha insistido en la necesidad de poner coto a esta actividad y trabajar realmente desde el Gobierno andaluz por un aire respirable y que no suponga un riesgo para nuestra salud y nuestro entorno.


El Silencio de la television pública en Guipuzcoa

En Guipuzcoa, la televisión pública no informó de la manifestación contra la incineración a la que acudieron más de 8000 personas.

El colectivo GURASOS está formado por padres, madres, abuelos, abuelas, etc preocupados por la salud y el futuro de sus pequeñ@s, con el apoyo de médicos y con la administración en contra.
Ayudemosles a hacer oír su voz.